Mérida, México
Comenzamos esta visita con una reunión en la ciudad de Akil (localidad situada a unos 45’ de Mérida). Allí nos recibieron los hermanos y amigos con los que hemos estado relacionándonos durante los últimos meses y desean escuchar acerca de Dios. Después de saludarnos y presentarnos, comenzamos con un tiempo de alabanza y adoración a Dios. A continuación el pastor Abellán compartió una palabra sobre las acciones que debemos tomar si queremos experimentar un milagro de Dios. Al llamado respondió la mayoría de los asistentes y 4 personas hicieron la oración de fe. La reunión terminó con un tiempo de comunión en el que pudimos tratar y orar por diversas necesidades de algunas personas. Luego los niños -y no tan niños- disfrutamos de una piñata.
Al terminar la reunión en Akil llegamos a la ciudad de Mérida. Allí nos recibieron los hermanos German y Norma quienes, con mucho cariño y excelencia, nos hospedaron en su casa y prepararon un refrigerio que nos permitió tener un tiempo de relación y poder tratar algunos temas importantes para los planes misioneros en este lugar.
El domingo comenzamos la reunión orando por las necesidades de los presentes y escuchando testimonios de lo que ha Dios ha hecho en algunos. Luego alabamos y adoramos a Dios sintiendo su presencia. A continuación el pastor Abellán compartió una palabra sobre la necesidad que tiene esta ciudad de una iglesia que viva un cristianismo real basado en quién es Dios y lo que quiere de nosotros. El llamado estuvo dirigido a aquellos que quieran ser parte de esta iglesia en Mérida, levantándose la mayoría de los presentes. Terminamos compartiendo los alimentos, respondiendo a preguntas, conociéndonos mejor y disfrutándolo.
Estamos convencidos que el tiempo de Mérida ha llegado. Dios está preparando los corazones y las circunstancias para empezar algo grande aquí. ¡Amén!
O vas, o ayudas a ir
Isaías 6.8
Por los responsables de esta misión.
Para que el grupo se consolide y comprometa en ser Centro de Vida Cristiana.
Por personas que pueda encargarse de la alabanza.
Por la vida de Breda Martínez y de la familia Martínez Torres y todo lo que conlleva el cambio de ambos a la ciudad de Mérida.
Por el grupo de personas en el poblado de Akil.
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Cumple la gran misión a través de ayudar a que otros vayan, mientras tú
cumples el propósito de Dios para tu vida en tu ciudad.
