Despidiendo el año juntos

El pasado 16 de diciembre nos reunimos como misión con el propósito de tener un convivio de fin de año al que asistieron 15 adultos, 4 adolescentes y 3 niños.

Comenzamos orando y agradeciendo por distintos motivos como: salud, trabajo, familia, nuestros líderes y pastores y poniendo en manos de Dios el año que comienza.

A continuación, tuvimos una reflexión basada en la parábola de los talentos, en la que se nos desafío a tomar riesgos por el reino de Dios, así como lo hacemos a veces por otras cosas, situaciones o amistades. La idea fue animar a usar lo que el Señor nos ha dado y no descuidarlo.

Una vez finalizada la reflexión compartimos los alimentos que cada una de las familias aportó con mucha variedad. Después de la cena tuvimos una actividad muy divertida de entrega de regalos unos a otros por medio de una dinámica en la que, tanto chicos como adultos, lo pasamos muy bien. Para finalizar los niños y adolescentes rompieron una piñata, la cual estaba llena de distintos dulces que también aportaron todos.

Sin duda alguna fue un momento muy agradable y bendecido para todos, ya que nos hacía falta alguna actividad a todos juntos.

Orando por la ciudad

Al día siguiente realizamos una salida con algunos adolescentes al centro de la ciudad para orar por las personas que lo desearan. Antes de hacerlo pusimos ese tiempo en oración, pidiéndole a Dios dirección para toda la actividad. 

Los chicos se colocaron con unos carteles que hicieron ellos mismos ofreciendo a quienes pasaban la oportunidad de orar por ellos. Fue un momento muy bonito ya que pudieron orar por 8 personas y muchas más se acercaron a leer los mensajes. Después de cada oración que hacían los chicos, compartían una paleta donde venía el Facebook de Centro de Vida Querétaro. Una señora dejó sus datos para ser contactada.

Nos animó mucho esta actividad. Hubo personas que pidieron orar para no regresar a las drogas, otras por sanidad y algunas se burlaban o hacían comentarios fuera de lugar. Sin embargo, esto no desanimó a los chicos, al contrario, entendieron que siempre habrá personas que rechacen el reino del Señor.

O vas, o ayudas a ir